Ya comentamos la semana pasada que incluso se han atrevido con laFira y están poniendo en duda la honorabilidad de los miembros del Consell de Festes, en el que están representados todos los estamentos locales y donde hay personas de diferente procedencia ideológica y de varios partidos políticos. Sin ir más lejos, Leonardo Molina, representante del PP en el Consell de Festes, no acudió a la reunión donde se han presentado las cuentas de la Fira que ha finalizado recientemente.
Pero no se conforman con eso y cada principio de mes, piden revisar todos los asuntos que entran en el registro municipal. Algo que se les concede mes tras mes y para lo que disponen de un ordenador en el Servicio de Atención y Tramitación (SAT). Se enteran de todo lo que pasa en el Ayuntamiento, debido a la absoluta transparencia que hemos practicado siempre desde el PSPV-PSOE.
Aún así están pidiendo continuamente información y la revisión de expedientes, de manera que algunas semanas tiene más de un funcionario trabajando para ellos, con lo que significa de retraso en los asuntos que se están llevando a cabo.
En cambio, todavía tienen la desfachatez de decir que se les oculta información, cuando en los ayuntamientos donde gobierna el PP a la oposición sí que se les esconde los temas y se les niega casi toda la información. Ahora reclaman ya el presupuesto, cuando aunque lo tengan con mucha antelación van a decir que no, porque no, porque esa es su política en el Ayuntamiento: obstruir la gestión, negarse a todo y hacer propuestas irrealizables y demagógicas, que son fáciles de hacer cuando no se tiene responsabilidad de gobierno.
Hablan de que ya se conoce una cifra global, que evidentemente viene dada por los ingresos, y los gastos se tendrán que acoplar a los mismos. Y será similar a la del año pasado, gracias a la buena salud económica por la gestión del equipo de gobierno con mayoría del PSPV-PSOE.
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