La Generalitat, gobernada desde hace 16 años por el PP, acaba de avanzar que está prácticamente en bancarrota. Ha anunciado que paraliza todas las obras hasta 2014. En educación cede a la enseñanza privada toda futura construcción de colegios. En sanidad suprime camas hospitalarias y dice que no construirá ningún nuevo centro de salud, e incluso no pondrá en funcionamiento los que están a punto de concluirse. La propia Diputación ha aprobado suspender los Planes Provinciales para los ayuntamientos de más de 5.000 habitantes, entre ellos el de Onda, al que le tocan dos obras.
Ya sabíamos que estaba al borde de colapso. Que los bonos de deuda valenciana que vencen en diciembre tienen dificultades para cobrarse. Que las residencias de ancianos hace meses que no cobran y amenazan con cerrar. Que los farmacéuticos están a punto de quebrar por impagos de la Generalitat. Que las deudas a los ayuntamientos son insostenibles. Que los pagos en educación se retrasan, que las empresas del Plan Confianza sólo han cobrado 80 millones de los 1.200 de obra realizada...
Pero que el señor Rajoy, por presiones de Castilla-La Mancha y Aragón, renuncie al trasvase del Ebro en su programa y cuestione la prioridad del corredor mediterráneo, que el Goiderno socialista de España consiguió hace 15 días en Bruselas, es un insulto a los valencianos.
Con estos recortes, Onda pierde el centro de salud, el vial rápido a Vila-real, el TRAM, camas en el Hospital de la Plana, competitividad de nuestras empresas con el corredor mediterráneo, la apertura del segundo CEAM o la viabilidad del centro de día de Alzheimer.
En cambio, el PP no ha recortado los 3,5 millones del campeonato de golf en Borriol, la Fórmula 1, la Ciudad de las Lenguas, el aeropuerto de Castellón o Canal 9. En total, .3.500 millones de euros para 12.000 enchufados. Tampoco van a hacer pagar el impuesto de patrimonio a los 19.000 valencianos que tienen más de 700.000 euros, ni modifican el tramo del IRPF para los que más ganan.
No. En la Comunitat Valenciana no hay recortes para todos, sólo para los más débiles. Y ese mismo PP, que nos ha llevado a ser la comunidad más endeudada de España, la campeona del paro, la de menos camas hospitalarias y la de mayor fracaso escolar, anuncia que nos va a sacar de la crisis sin decir cómo. Oculta que sus fórmulas ya han fracasado en Italia, Irlanda, Grecia y Francia.
El PSOE, por el contrario, anuncia más impuestos para los ricos, reforma de las instituciones, mantenimiento de la educación pública, la sanidad universal, las prestaciones por desempleo y las pensiones, y los incentivos para las empresas. Todo esto está en juego en las elecciones generales del 20-N.
Socialistas de Onda
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